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El Gobierno redujo impuestos para la
industria exportadora, una medida muy esperada por el sector ya que
significa una baja de impuestos de alrededor de U$S 150 millones para dicho
sector. Se trata de una suba en el reintegro a las exportaciones, lo que
mejora la competitividad de la industria argentina y otorga un mayor
potencial para participar de las cadenas globales de valor.
Esta medida, que fue publicada en el Boletín Oficial,
beneficia a sectores como autopartes, textiles (prendas de vestir),
instrumentos de control y médicos, maquinaria y máquinas eléctricas,
manufacturas de cuero, muebles, juguetes, calzado y metalúrgico, entre
muchos otros.
Cabe resaltar que las alícuotas estaban congeladas
hace 15 años y con esta medida el reintegro aumentará entre un 30 y un 80
%, con una mayor incidencia para los que más valor agregado generan. El
objetivo es mejorar sensiblemente la competitividad de la industria
argentina, con una reducción de la carga fiscal asociada a las
exportaciones industriales superior a los U$S 150 millones anuales.
Se estima que la incidencia del contenido tributario
indirecto sobre el precio de venta/exportación oscila entre 7 % y 15 %,
mientras que las alícuotas vigentes de reintegros a la exportación de los
productos comprendidos en el análisis llegaban, como máximo, al 6 %. Desde
ahora, se espera llegar a un 8 %.
Con esta medida las empresas recuperarán, al momento
de la venta al exterior, parte de los impuestos que tienen los productos en
toda la cadena de producción como ingresos brutos, tasas municipales,
impuestos específicos sobre combustibles, derechos de importación sobre
partes y piezas, entre otros .
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